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Estas son las 'Colombianadas electorales'

En Colombia la política se fue de fiesta: trago, plata y comida han ambientado el desarrollo de las campañas electorales al Congreso desde la época dorada de los caciques electorales (1978 – 1994) hasta hoy. Por eso seguimos siendo una ‘democracia folclórica’.

Basta comparar las 'papayeras' y los concursos de baile que utilizaban los caciques como Tito Rueda, Tiberio Villareal, Bernardo Guerra, Gustavo Balcázar o Alberto Santofimio el día de elecciones, para saber que la diferencia con los candidatos al Congreso en estos comicios (30 años después), no es mucha.

Quizás la diferencia generacional es más de forma que de método, pues pasamos de la entrega de tejas y aguardiente, a la provisión más 'sofisticada' de motos y whiskey.
Pasamos de la entrega de camisetas con estampados de los Partidos (y sus fracciones) a la propaganda unipersonalista dispersa en carros, llaveros y faldas.

Asimismo, pasamos de la publicidad estática a la publicidad móvil. Antes la figura de los directorios departamentales del Partido importaban como centro propagandístico, y ahora predominan los trabajadores de la economía informal (chanceros, mototaxistas y vendedores de ‘'solterita') como medios dinámicos de proselitismo andante.

Hay cosas que solo ocurren en Colombia. Por eso, hemos aceptado socialmente el término 'colombianadas' para referirnos a esos casos excéntricos, folclóricos e imaginativos que rinden homenaje a nuestra 'picardía' o 'malicia indígena'.

Por eso, de las 'colombianadas' no se escapan ni los políticos, y más, si éstos están en campaña electoral. Por ejemplo:

1. La piña de Maritza

La candidata llanera al Senado por el Partido de la U, Maritza Martínez, distribuyó parte de su publicidad electoral en piñas empacadas con un paquetico blanco donde está su foto y el número que la ubica en el tarjetón.



Esta colombianada electoral ahorra costos y puede invadir la ciudad con su publicidad. De esa forma, con Maritza pasamos de la lechona a la piña.

2. 'El arropado' de Wilmer

El candidato a la Cámara de Norte de Santander por el Partido de la U, Wilmer Carrillo, convirtió una camioneta 4x4 en el mejor 'vehículo' para publicitar su campaña electoral.

'El arropado' -como lo llaman los habitantes de Cúcuta-, representa la colombianada electoral más llamativa a la hora de hacer "propaganda móvil".





3. El 'buen difunto' que utilizó Quintín

Ricardo Quintín, candidato a la Cámara del Cesar por el Partido Conservador, sorprendió cuando 12 horas después de la muerte de Fernando González Pacheco, ya tenía colgado varios pendones en Valledupar utilizando la imagen y el nombre de este reconocido periodista para hacer proselitismo electoral.

Quintín, quiso probar de manera oportunista que los muertos también "cuentan", y más, cuando traen a la memoria un personaje de las cualidades admirables que tuvo Pacheco.





4. Cifuentes, ¡sí va al mundial!

Fabio Cifuentes, candidato al Senado por la Alianza Verde, no desperdició la oportunidad de utilizar la imagen del futbolista Radamel Falcao García, para promocionar su campaña.

Para Cifuentes "los milagros" también hacen parte de la política, y por eso, apeló a Dios y a Falcao para esperar su elección el próximo 9 de marzo.






En Twitter: @Velasco_Juan